Formación sobre Diversidad Funcional. Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.

Algunos profesionales de Insular Asistencia participaremos del programa de extensión universitaria de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria:  Hacia el nuevo paradigma de la Diversidad Funcional. Esta formación tiene como objetivo mejorar los conocimientos y las actitudes esenciales para el apoyo profesional a la diversidad funcional.  En el se abordan los aspectos más relevantes del concepto de diversidad funcional, el marco normativo y los itinerarios en diversidad funcional; se desarrolla una formación específica en torno a los Centros Especiales de Empleo.  Insertamos el enlace al curso:

La Diversidad Funcional es una nueva categoría analítica basada en el modelo biopsicosocial  o de la diversidad que promueve la consideración de la multidimensionalidad de las personas con diversidad funcional y que permite una mejor comprensión de la discapacidad. Este modelo de la diversidad está convirtiéndose en el modelo defendido por las personas con diversidad funcional y por los profesionales del ámbito social yt de la educación, aunque necesita aún de tiempo para que vaya asentándose, en la sociedad, los fundamentos que patrocina.
Al igual que el concepto de discapacidad nació para sustituir al de minusvalía, el de diversidad funcional viene a deconstruir la discapacidad. El concepto de diversidad funcional, que todavía hoy se encuentra al otro lado del espejo, como Alicia en el País de las Maravillas, pretende sustituir el discurso aún hegemónico que perpetua la desigualdad entre personas con y sin discapacidad. El concepto de diversidad funcional cuestiona también los modelos históricos dominantes de carácter médico-rehabilitador, asistencial y toda postura dicotómica que establece diferencias insalvables entre dis-capacidad/capacidad, especialmente en lo relacionado con la realidad sociolaboral.

Parece necesario, y este curso es un paso más hacia ese objetivo, que empecemos a manejar a diario el concepto de diversidad funcional en toda su extensión. Por lo pronto y como modesta contribución a este empeño, invitamos a conocer las opiniones de   Mario Toboso, científico del CSIC y experto en accesibilidad universal en relación a este tema.

Ajuste Laboral: Formación en atención al público

La importancia de una adecuada atención al público (cliente/usuario) define la ventaja competitiva conque una empresa se maneja en el mercado de trabajo, para crecer y para obtener rentabilidad. Esta ventaja es la que atrae a los clientes de un producto o a los usuarios de un servicio, crea la confianza suficiente para que vuelvan a solicitar los productos o servicios ofrecidos y fideliza al cliente/usuario hacia la organización. En este sentido la planificación  y organización de la atención al cliente estará orientada a la satisfacción de sus necesidades y expectativas. Los clientes de un producto o los usuarios de un servicio son la base de la supervivencia de la mayoría de las empresas, incluidos los Centros Especiales de Empleo.
Saber atender al cliente/usuario no es tarea fácil y en actividades laborales como la que desempeña Insular Asistencia en el control de las zonas azules de aparcamientos no es una cuestión de tener más o menos facilidad de palabra, sino que requiere de una serie de principios y actitudes específicas. El servicio que desempeña Insular Ásistencia tiene cientos de usuarios cada día, y en esta realidad es imprescindible la sensibilización y formación de nuestros trabajadores para poder satisfacer nuestra propia necesidad de ofrecer una adecuada calidad de servicio en la tarea da atender a nuestros clientes.

Es un hecho diferenciador de los usuarios de nuestro servicio su heterogeneidad. Nuestro servicio lo puede utilizar cualquier personas, sin que exista una tipología definida de cliente, por lo que nuestra premisa es atender de manera eficiente las necesidades de nuestro servicio, de manera que en la medida de lo posible exista un alto nivel de satisfacción de todas las personas implicadas; y esto pasa ineludiblemente por nuestra decisión de mejorar día a día. Profundizar en la importancia de causar una buena impresión proyectando una imagen positiva personal y de organización; establecer formas de relaciones adecuadas adquiriendo competencias para la atención al cliente/usuario especialmente en su componente acdtitudinal o generar valor hacia la comunidad por el trabajo desempeñado, son algunos de los aspectos que nos esforzamos en mejorar de manera activa. En la formación programada por la Unidad de Apoyo a la actividad productiva de Insular Asistencia, venimos abordando la mejora de actitudes frente al trabajo y de relación interpersonal con nuestros clientes, tanto internos como externos, desde un rol activo-participativo, de modo que cada uno de nuestros trabajadores sea protagonista de su propio aprendizaje. Para ello esta formación que comienza en las sesiones grupales emigra hacia todos y cada uno de los puestos de trabajo donde cada trabajador singularmente desempeña su que hacer diario.
Para alcanzar nuestros objetivos, nuestra primera necesidad de atención la focalizamos en nuestros propios clientes internos: las personas con discapacidad constituyen un grupo amplio y heterogéneo del que sólo una minoría, a día de hoy, logra integrarse en el mercado laboral. Cuando esto sucede, la formación continua del trabajador es garantía de su competencia, competitividad y estabilidad laboral. En este sentido, en la detección de las necesidades de apoyo determinadas en la valoración de las capacidades de nuestros trabajadores y el análisis del puesto de trabajo, para establecer los apoyos individualizados necesarios para la adecuada adaptación de cada trabajador a su puesto de trabajo, la formación en habilidades sociales en la atención al público es un aprendizaje determinante para alcanzar el grado de integración óptimo en un entorno donde la interacción con el usuario de zona azul es permanente.

Visita Sociocultural: propiciando la integración en la comunidad

Las actividades socioculturales facilitan mejor que ninguna otra actividad la integración en la comunidad. Este tipo de integración supone antes que nada la eliminación de las barreras que se impone la propia persona con discapacidad.

La integración en su entorno por medio de la cultura supone romper con el estereotipo de la persona enferma que se maneja desde muchas familias y desde la sociedad en general. La activida sociocultural para las personas con discapacidad supone un salir al exteriro para encontrar un lugar en la sociedad, especialmente cuando además, como ocurre con estas personas, desarrollan una actividad laboral de valor para su propia comunidad.

Planificamos una salida con un grupo de trabajadores de Insular Asistencia a la sala de exposiciones Felo Monzón del Ateneo cultural de Vecindario. Para la mayoría de ellos era la primera vez en sus vidas, y ya pasan todos de los 35 años, que pisaban una sala de exposiciones, museo, galería o cualquier otro lugar de caracteríticas similares. La actividad tenía un claro objetivo de refuerzo de la autonomía, que no se limita a la integración a través del empleo, siendo ésta, sin duda, el motor más potente para propiciar el cambio de una situación de dependencia y vulnerabilidad, a otra de independencia,sino que refuerza las capacitades enfatizando la interacción de la persona con discapacidad y el ambiente donde vive.

Motivaciones para la práctica deportiva

El deporte, el ejercicio físico razonable, no sólo es una práctica de salud recomendable para una persona con discapacidad, como para cualquiera,  sino un factor de autonomía personal de gran valor para la inclusión de la misma en las diferentes facetas de la vida en sociedad. La práctica deportiva es un antídoto eficaz a las actitudes pasivas frente a la integración sociocultural y sociolaboral que adoptan muchas personas con discapacidad debido a su propia experiencia vital de exclusión, falta de oportunidades, carencias de habilidades sociales y laborales y atunomía personal.

Un trabajo digno facilita sin duda el cambio hacia una mejor calidad de vida, con eso contamos ya en Insular Ásistencia. Sin embargo necesitamos saber motivar a nuestros trabajadores para que introduzcan en sus hábitos otras conductas adaptativas necesarias mantener un buen estado de salud, una vida sociocultural más rica y capacidad laboral más competitiva. En esta dirección, durante los últimos meses de 2015 y lo que va de este 2016, en las reuniones grupales en el marco del programa de habilidades sociales y actitudes laborales, pero especialmente en las intervenciones individuales realizadas a partir de la detección de las dimensiones de calidad de vida del Programa de Apoyos Individualizados que desarrollamos en nuestra entidad, se ha hecho especial hincapié en la motivación para la realización de actividades físico-deportivas.

Abordar el ámbito deportivo entre trabajadores con discapacidad adscritos al empleo protegido o al empleo con apoyo, es una tarea compleja. Es frecuente encotrar poca predisposición  a realizar actividades que supongan esfuerzo físico al terminar la jornada de trabajo. La tedencia al sedentarismo o a la ausencia de un ejercicio físico moderado es un problema importante para las personas con discapacidad debido a que es un factor de riesgo de cronificación o empeoramiento de las condiciones o las secuelas que han generado la propia discapacidad. En muchos casos, además, las dificultades sobrevenidas por el sobrepeso, la falta de flexibilidad, el embotamiento o las situaciones de estrés, pueden suponer un deterioro de la capacidad productiva de estas personas y afectar negativamente a su integración sociolaboral. Propiciar en la medida que nos sea posible el ámbito deportivo entre los trabajadores con discapacidad es una tarea que hemos de afrontar desde las unidades de apoyo, aún siendo conscientes de que es un camino complicado y lleno de actitudes de rechazo a la practica de cualquier tipo de actividad físico-deportiva.

En nuestro Centro Especial son varios los trabajadores que realizan alguna práctica o actividad físico-deportiva. En la mayoría de los casos esta práctica está relacionada con las actividades de gimnasio. En estos casos, las actuaciones de la Unidad de Apoyo de Insular Asistencia, se circunscriben al seguimiento, apoyo y refuerzo, en su caso, de las mismas, básicamente procurando que se mantenga una continuidad en su práctica. En algunos casos también se insta a cambios funcionales en las actividades que realiza alguno de estos trabajadores en el gimnasio, proponiendo adaptacions o modificaciones de la actividad que puedan suponer una mejora en los beneficios que las mismas proporcionan. Por ejemplo, y teniendo en cuenta las exigencias físicas de la actividad laboral que realizan, se les orienta o aconseja a focalizar los ejercicios a fortalalecer las extremidades inferiores y ha adquirir un buen tono muscular, para minimizar en la medida de lo posible, el cansacio y la fatiga propia a la actividad laboral que realizan.

El trabajo de fomento y motivación hacia la práctica de un deporte como medio para mejorar la calidad de vida en general, también ha dado como resultado cambios de actitudes y comprensión de la necesidad de cambios en los estilos de vida.  A día de hoy alguno de nuestros trabajadores ha iniciado una actividad diaria de natación a partir del objetivo planteado de cambio de hábitos, de situaciones que complican el desempeño del trabajo, como ocurre con el sobrepeso y el  manejo de las situaciones de estrés laboral. Nadar después de salir del trabajo es una magnífica elección para abordar estos cambios y para sentirse mejor consigo mismo.

Mejorando las competencias de Liderazgo

Trabajar con grupos de personas con discapacidad en un entorno productivo de bienes o servicios no es cosa fácil. Mejorar las competencias de las personas que tienen alguna responsabilidad en la coordinación de la productividad en Centros Especials de Empleo es una tarea ineludible para alcanzar los objetivos de integración sociolaboral de sus trabajadores. 

Entre los meses de febrero y abril en Insular Asistencia se está siguiendo un curso de Dirección de equipos y gestión de conflictos. Los objetivos que perseguimos con el mismo es adquirir las competencias necesarias que permitan una mejor adaptación de los trabajadores a las necesidades de la actividad productiva y al porgrama de apoyos individualizados de cada uno de ellos en relación a los ajustes personales y sociales de cada uno. Para ello esta formación nos proporciona competencias para aplicar técnicas de trabajo en equipo y motivación laboral; distinguir los diferentes conflictos que se pueden originar en nuestro sector y aprender a resolverlos según su origen, así como adquirir mayor competencia para la gestión de las emociones ante los conflictos.

Esta formación da respuesta a las necesidades de liderazgo detectadas por la Evaluación de la Unidad de Apoyo de Insular Asistencia, y dota al trabajador/es implicados en la misma de herramientas útiles que permitan mejorar la motivación y el trabajo en equipo, así como evaluar los factores básicos de riesgo psicosociales que pueden originar algún tipo de conflicto y la manera cómo abordarlos y solucionarlos.

La formación se realiza bajo los principios metodológicos de aprendizaje activo y aprendizaje social y es impartida por la escuela de negocios de la Fundación FYDE, mediante la metodología elearning, lo que mejora la accesibilidad de nuestro alumno a la formación. El aprendizaje activo infiere a nuestro trabajador en formación  de capacidad para construir su propio conocimiento, una esperiencia muy importante en la formación de las personas en general, pero más si cabe, en las personas con discapacidad, por su mayor dificultad histórica en la interacción educativa. El aprendizaje social facilitará la participación comunicativa y mejorará el desempeño de las funciones de liderazgo participativo y la capacidad para gestionar adecuadamente los conflictos funcionales de la actividad laboral que desempeñan los trabajadores con discapacidad de Insular Asistencia.

Facilitamos la Accesibilidad

Los controladores de zonas azules de Insular Asistencia reciben formación periódica sobre diferentes aspectos que afectan al desempeño de sus tareas laborales. En el mes de enero, y como parte de una actividad más amplia sobre las actitudes y habilidades sociolaborales, impartimos formación para mejorar el conocimiento (o implantarlo como nuevo aprendizaje), que sobre el derecho de accesibildad de las personas con discapacidad es importante que conozcan nuestros trabajadores.  Esta formación se ha ajustado a lo establecido en la Ley 51/2003 de 2 de diciembre de igualdad de oportunidades, no discriminación y accesibilidad universal, en la medida que se relaciona con el desempeño y competencia de nuestros trabajadores. 

Los conocimientos básicos adquiridos habilitan a nuestros controladores como comunicadores de accesibilidad en su area competencial de trabajo cotidiano. Saber explicar a los usuarios de una manera asertiva la necesidad de los aparcamientos reservados a discapacitados, intentando concienciar del problema que genera su uso indebido. Ayudar a facilitar el tránsito de las personas con movilidad reducida o dificultades motoras, sensoriales o psíquicas, así como personas mayores. Un aspecto muy relevante de esta formación es la concienciación del valor que esta forma de actuar genera en la comunidad.

Esta actividad está recogida en el Programa de capacitación grupal para el primer semestre de 2016. La metodología de acción grupal de desarrollo participativo cíclico y retroalimentado, apoyada en refuerzos, apoyos y orientaciones individualizadas in situ en el puesto de trabajo, mejoran la fijación de los conocimientos e incrementan el nivel competencial de estos trabajadores, al dotarlos de capacidad funcional para ejercer, en un momento dado, de comunicadores de accesibilidad, de facilitadores de las necesidades de las personas con menos capacidad, para interactuar con la información del entorno.