
Hace unos días, por la mañana, en las oficinas de Insular Asistencia, vivimos uno de esos momentos que te fortalecen para seguir trabajando en la mejora de la calidad sociolaboral de las personas con discapacidad. Como indicamos en nuestro blog, en la columna a tu izquierda, estamos abiertos a la colaboración desinteresada para fomentar las unidades de apoyo, para lo cual compartimos nuestra experiencias y aprendemos de la de los demás.
Recibimos la visita de una trabajadora social responsable de la unidad de apoyo de un Cee , con trabajadores en Gran Canaria y en Tenerife. Resultó muy gratificante el entusiasmo y la motivación con la que afronta su trabajo y las ganas de hacer las cosas bien. Siempre es más fácil hacer las cosas bien que hacerlas mal, y ella transmite facilidad en la forma de afrontar los retos que le plantean los trabajadores con discapacidad de su entidad. Hablamos de cómo motivar a la participación de los trabajadores que mostraban contrariedad, cuando no rechazo, a la participación en alguno de los ámbitos funcionales de trabajo que se han de potenciar desde las unidades de apoyo. Nos comentó cómo se había preocupado mucho por buscar información, como la habían ayudado y mucho en algunos casos y en otros en los que encontró una oferta comercial de externalización de los servicios de ajuste. El rato de conversación que tuvimos en las oficinas de Insular Asistencia y en la visita a alguno de los puestos de trabajo de nuestra organización, fue de provecho. Hablamos de algunas de las principales dudas que nos asaltan a la hora de ofrecer alternativas para la mejora de la calidad de vida de nuestros trabajadores con discapacidad, de las cosas que los suyos como los nuestros a pesar de tener cometidos laborales bien diferenciados, comparten necesidades comunes, sobre las que sin duda toda idea, iniciativa o propuesta son de gran ayuda para encontrar la mejor manera de satisfacerlas, en la medida de las posibilidades de cada uno.

Resultó ser un buen día para colaborar y compartir nuestras experiencias de manera que todos aprendimos un poco más sobre cómo llevar a cabo las funciones de las Unidades de Apoyo. La preocupación porque los servicios de ajuste personal y social sean los más adecuados posibles a las características de cada uno de nuestros trabajadores en centros especiales de empleo. Un servicio de dentro hacia afuera, conectando el ámbito laboral habitual con la cotidianidad social y la integración en la comunidad.
La intención es mantener contactos profesional fluidos que nos ayude a resolver dudas en un momento dado. Era martes y 13, pero al igual que hemos hecho con las estereotipias y falsedades que tanto discriminan a las personas con discapacidad y en concreto por lo que se refiere a su integración sociocultural, no nos íbamos a preocupar por esta superchería.